El blanqueador con cloro puede hacer que la ropa blanca se vea más blanca, pero también es dura para la piel, los ojos, los pulmones y el medio ambiente. Pero puede limpiar y blanquear las telas de su hogar sin el uso de lejía para el hogar, sustituyendo las alternativas seguras y naturales que ofrecen resultados impresionantes.
Paso 1
Vierte agua caliente en un tazón o balde grande y agrega varias rodajas de limón. Remoja tus prendas blancas en el tazón o balde durante una o dos horas. La combinación de agua caliente y ácido cítrico ayudará a disolver las manchas y restaurar la blancura de las prendas.
Paso 2
Deje que su lavadora se llene de agua. Agregue 1 taza de su detergente para la ropa regular y 1/2 a 1 taza de vinagre blanco. Agregue su ropa blanca a la lavadora y lave las prendas como de costumbre. El ácido acético en el vinagre ayudará a blanquear y suavizar sus telas.
Paso 3
Cuelga tus prendas blancas para que se sequen al sol. La luz del sol puede blanquear aún más las telas.