El loto es una planta acuática exótica cuyas partes son comestibles. Produce una floración atractiva que se abre por la mañana, al amanecer, y se cierra al final de la tarde. Debido a este patrón de floración, los antiguos egipcios creían que la planta de loto dio a luz al sol. Esta planta majestuosa generalmente se encuentra creciendo en estanques de jardín poco profundos, pero también puede adaptarla para crecer dentro de una casa. Seleccione un contenedor apropiado y proporcione condiciones ambientales adecuadas para cultivar con éxito su planta de loto en interiores.
Paso 1
Remoje un tubérculo de loto en un recipiente de plástico con agua tibia hasta que comience a producir brotes. Esto puede tomar hasta dos semanas.
Paso 2
Llene una maceta de plástico sin entrenamiento con 3 pulgadas de tierra arcillosa. El diámetro de la maceta debe ser de 18 pulgadas y la profundidad debe ser de al menos 6 pulgadas.
Paso 3
Coloque muy suavemente el tubérculo de loto en la olla. Tenga precaución con respecto a los brotes que crecen del tubérculo. Pueden dañarse fácilmente.
Paso 4
Agregue gradualmente tierra sobre el tubérculo para que haya una profundidad de 1 pulgada de tierra sobre la parte superior de la planta.
Paso 5
Aplique una capa delgada de gravilla sobre la tierra y llene la maceta con agua tibia. La grava evitará que el tubérculo flote fuera del suelo.
Paso 6
Coloque la maceta en el alféizar de una ventana soleada donde la planta recibirá un día completo de luz solar. La cantidad recomendada de luz solar es de seis a ocho horas por día.
Paso 7
Mantenga la temperatura caliente para inducir la floración. El aire debe estar por encima de 80 grados Fahrenheit.
Paso 8
Verifique el nivel de agua de la planta de loto todos los días. Todas las partes de la planta, excepto la punta de crecimiento, deben exponerse constantemente al agua.
Paso 9
Agregue una tableta de fertilizante de loto al recipiente de loto cada dos semanas.